¿Que es?

El psicodrama se centra en el sujeto protagonista o en el grupo de terapia. Los participantes tienen que representar sus experiencias espontáneamente. Se pasa de un relato longitudinal al relato tridimensional de la escena representada; de una sintaxis de la palabra a una sintaxis de la acción.
La relación entre los individuos de la situación en juego deja de ser una historia narrada literalmente para pasar a ser algo vivido y revivido, y observado y compartido en el aquí y en el ahora, lo que permite la adquisición de nueva información la historia y los matices de rol interpretado por el sujeto en la misma.
El sujeto paciente o protagonista es el actor principal de la dramatización, el que provee el material de la dramatización y al mismo tiempo la interpreta. Es, pues, de forma simultánea, actor y autor principal. En ocasiones, puede haber más de un protagonista. En relación a la actuación de este sujeto protagonista hemos de advertir que debe estar dirigida por cuatro principios:
1º. – Liberación de la espontaneidad
Ofertándole todas las posibilidades para que exprese su espontaneidad con toda libertad.
2º. – Puesta en escena
El sujeto protagonista y paciente dramatiza sus conflictos en lugar de hablar de ellos, representando sus experiencias, superando el nivel verbal. El mismo sujeto elegirá el lugar el tiempo y la escena.
3º. – Participación y entrega
El sujeto protagonista y paciente deberá quedar comprometidamente inmerso en la acción. Es imprescindible su compromiso afectivo y emocional.
4º. – Realización simbólica o concretización en actos o imágenes
Se facilitará al sujeto protagonista o paciente el encuentro con las partes de su yo o con todas las personas que tienen relación con su mundo interno y externo. El protagonista proyecta sobre el escenario cada una de las cosas que están en su mente, en su fantasía, en su memoria sensorio-corporal.
El psicodrama debe su existencia a Jacob Levi Moreno. Aunque anteriormente distintos autores habían utilizado las escenas dramáticas en el estudio de la personalidad. Binet, en 1.893 utiliza las dramatizaciones para el estudio de los tipos psicológicos infantiles, presentándolas en forma de representaciones pictóricas. Britain en 1.907 y Libby en 1.908 las utilizan en la investigación de la imaginación y otros aspectos psicológicos. Rossolino en 1.908 y Healy y Fernand en 1.911 utilizan las dramatizaciones en los estudios que llevan a término sobre el examen diferencial de la sugestionabilidad en los niños.
Conceptos básicos en el proceso psicodramático serán:
a) La espontaneidad
El estado de espontaneidad motiva a menudo, no solo un proceso interno, sino también una relación social externa, esto es, una correlación con el estado de la otra persona creadora donde ya no sólo existe actuación, sino que también interactuación y comunicación.
b) El encuentro
Para J.L. Moreno, la facultad que cada uno tiene de ayudar a otro se explica mediante el “encuentro”, se trata de una especie de fusión, de empatía total entre los miembros de un grupo. Se trata de una “comunicación” que no se consigue a través del lenguaje, sino que con todos los miembros vigilantes y conexos entre sí; vista, tacto, movimiento o silencio, se tiene la impresión de ser una misma cosa, de comprender al otro plenamente.
c) La acción corporal
La verbalización no es el único modo de expresión en juego, la mímica, los gestos, la proyección del cuerpo y el manejo del espacio, entre otros introducen una nueva dimensión en el discurso. El control que se ejerce sobre la expresión verbal, se supera gracias a la dramatización. Muchas cosas que no pudieron decirse serán representadas.
Con la representación se consigue una mayor autenticidad y profundidad, así como una visión más completa del discurso total del paciente y de los terapeutas. Si ante un tema, en principio neutro, el paciente se ruboriza puede ser indicativo de que dicho tema, lejos de ser neutral para él, queda revestido de una especial importancia. En algunos casos, el gesto puede enfatizar la expresión verbal, pero, sin embargo, en otras puede despojarla de su sentido. El gesto es algo más que un símbolo, algo más que un simple refuerzo de la palabra.
d) La catarsis dramática
La catarsis dramática es un concepto introducido por Aristóteles, el cual utilizó el término para expresar el efecto peculiar que ejercía el drama griego sobre los espectadores. “En el teatro de la espontaneidad, el psicodrama, produce un efecto terapéutico, pero no en el espectador (catarsis secundaria) sino en los actores – productores que crean el drama y que al mismo tiempo se liberan de él” (Psicodrama J.L. Moreno. Pp XVI-XVII.
En la catarsis de integración lo que sale es el paciente mismo, y al salir de algo que lo estaba conteniendo, realiza su yo, se expresa contactando con los demás integrantes de la situación psicodramática en la experiencia vivida en común, tal y como afirma Jaime Rojas Bermúdez.
e) El “tele”
Se denomina “tele” al fenómeno por el cual, el paciente evalúa al terapeuta y percibe intuitivamente que clase de hombre es. Estas intuiciones de la conducta inmediata del terapeuta. El concepto de “tele” (del griego, lejos) constituye el fundamento la percepción interna mutua de los individuos entre sí.
La práctica de una sesión terapéutica psicodramática habrá de seguir una serie de etapas:
1ª. -Caldeamiento
Se ve a esta primera etapa como una preparación para la acción en la cual se busca un triángulo comunicativo de los participantes con el terapeuta.
El grupo se centra en un tema, surgiendo un clima común, en virtud de lo cual se crean sentimientos positivos y negativos que fluctuarán y finalmente tendrán solución en la dramatización.
El caldeamiento puede ser inespecífico. La atención se centra en el director. La estructura del escenario es de tipo radiado para favorecer la interacción grupal que caracteriza esta etapa. El papel fundamental del director, aparte de atraer la atención de los participantes, es intentar disminuir estados de tensión para crear el clima necesario para que empiece la dramatización.
Durante el caldeamiento específico surge la trama o problema del protagonista, siendo entonces cuando el sujeto se prepara para la dramatización y se organizan el contexto, los personas y las acciones por parte del director. Posteriormente será el protagonista quien prosiga e interprete su rol.
2ª. – Dramatización
“El campo operativo del psicodrama es el escenario. La operación fundamental la dramatización” (Paulovsky…)
La dramatización constituye la parte más importante de la sesión psicodramática.
Tiene como fin resolver el conflicto emocional planteado en la etapa anterior. No existen unas reglas para su desarrollo, es el protagonista quien hará fluir situaciones y pensamientos, y quien da rienda suelta a la imitación cuando es necesario ponerse en “el lugar de”.
La trama del protagonista se pone en escena y normalmente crea poca afectividad, por el contrario, cuando los participantes comienzan a entrar en su rol, la escena cobra realidad y carga emocional.
A medida que el participante entra en su rol, manifiesta los repertorios básicos de conducta, y el terapeuta puede, entonces, verlos al natural, en “el aquí y en el ahora”.
Una de las ventajas que tiene la dramatización es, que en ella pueden unirse pasado y presente del paciente, y en esta interacción, surgen los pensamientos y problemas del paciente que él mismo debe de solucionar en el transcurso de la acción.
El terapeuta tiene que dirigir de alguna forma la conducta para modificarla y que el sujeto comprenda, elabore y supere el problema.
3º. – Comentarios y análisis
En esta tercera y última etapa de la sesión terapéutica psicodramática se pide opinión sobre la dramatización. Es muy importante en este punto la afectividad del auditorio y sirve para que el protagonista no se sienta solo ante sus problemas y se dé cuenta de que lo que le sucede no es tan raro y que le ocurre a más personas.
La empatía surgida entre los miembros del grupo, hace que se muestren
diferentes puntos de vista sobre la situación del protagonista y que devuelvan a éste una
visión global de su problema, con el fin, de ayudarle.
Estas tres etapas se desarrollan obedeciendo a una determinada mecánica
escenificadora:
1º. -Apertura de la sesión
Jaime Rojas Bermúdez, iniciador del movimiento psicodramático en Argentina y en la actualidad residente en la española ciudad de Sevilla observa que si bien puede llevarse a término el inicio de la sesión psicodramática desde el centro del escenario y detrás de dos sillas colocadas frente a frente, también puede producirse el inicio de la sesión desde el auditorio.
2ª. -Apertura de la dramatización
El director separa las dos sillas-símbolo a modo de un telón y se sienta con el protagonista.
3ª. – Cierre de la dramatización
El protagonista y los yo- auxiliares salen del escenario, aunque también puede ocurrir que el protagonista se quede y se centren en él los comentarios: Esto último ocurre cuando los niveles de emoción han sido altos y el auditorio se identifica con determinados roles perdiendo su visión grupal.
Cuando se recupera esta visión grupal, vuelve el protagonista al auditorio y se cierra la dramatización.
4ª. – Cierre de la sesión
Este paso lo indica el director cuando cree oportuno, siempre que se trate de psicodrama público sin horario. Si existe horario, hay que señalar el tiempo y el director es el que adecua las etapas a ese horario.
Buenas Tardes, una pregunta el psicodrama se podría utilizar como técnica para aliviar la angustia?
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Buenos días Thalía
Desde mi punto de vista considero que este tipo de terapia se puede utilizar para la angustia, sin embargo, como tal no es un alivio sino, mas bien para que el sujeto se de cuenta de que es lo que posiblemente este generando su verdadera angustia y al mismo tiempo el terapeuta pueda identificar alguna herramienta alternativa para poder solucionar el problema. Aunque es importante mencionar que existen diferentes maneras de aplicar el Psicodrama.
Saludos cordiales.
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Blanca Aguero soy escritora
.me inyeresa psicodrama.
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